La concesión de una licencia de apertura para un negocio por parte de un ayuntamiento es un trámite que puede demorarse meses e incluso años. Cuando esto ocurre, el propietario debe afrontar una serie de costes sin tener la posibilidad de generar ingresos, lo que produce un importante desequilibrio económico al empresario.
Esta situación, bastante común para prácticamente cualquier pequeño negocio, necesitaba ser corregida, y la licencia exprés fue la respuesta del legislador a esta problemática.
Qué es la licencia exprés o declaración responsable
En mayo de 2012 entra en vigor el decreto ley 19/2012, que aprueba el modelo de declaración responsable o licencia exprés para acelerar la apertura de un negocio, ya que permite que no haya que esperar a la concesión de la licencia de apertura como tal.
Mediante esta declaración responsable el propietario lo que hace es comunicarle al ayuntamiento que se cumplen todos los requisitos medio ambientales y administrativos necesarios para abrir su negocio.
El ayuntamiento realizará una inspección para comprobar que los datos aportados son verídicos y, si da el visto bueno, podrá realizarse la apertura al público del local. En caso contrario se elaborará una carta con irregularidades a subsanar, de forma que arreglando esos puntos se podrá continuar adelante con el trámite.
La presentación de esta declaración responsable no exime al interesado de cumplir los requisitos necesarios para obtener la licencia de apertura, pero al poder abrir y ejercer su negocio de forma normal hasta que el trámite finalice no se produce ese perjuicio económico que existía antes de este cambio legislativo.
Quién puede solicitar la licencia exprés
No todas las actividades pueden acogerse al decreto 19/2012 y solicitar la licencia exprés. La legislación vigente tan sólo lo permite a aquellos locales cuya superficie útil de exposición y venta al público no supere los 300 metros cuadrados.
Tampoco podrán solicitarla la licencia exprés aquellos negocios que no se encuentren sujetos al impuesto sobre actividades económicas (IAE). Algunos ejemplos de negocios que sí pueden acogerse a esta medida serían el comercio al por menor de alimentación, calzados y textiles, seguros, salones de peluquería, etc.
Es importante tener en cuenta que cada ayuntamiento puede tener desarrollos específicos de la norma general, por lo que será necesario consultar la legislación municipal en cada caso o contactar con profesionales que puedan ayudar a gestionarlo.
Qué necesito para solicitar la licencia exprés
Al igual que con la licencia de apertura, el negocio debe presentar un proyecto técnico, un informe elaborado por un ingeniero o arquitecto que avale la adecuación del local a la actividad que se pretende realizar.
Si quieres conocer más acerca de qué es un proyecto técnico, para qué sirve y cómo se realiza, puedes visitar este enlace donde te lo explicamos.
Una vez terminado el proyecto técnico, también se deberán pagar unas tasas que serán variables dependiendo del municipio al que se esté solicitando la licencia exprés. Cuando dichas tasas ya se encuentren abonadas, se presentará ante el ayuntamiento el recibo de abono, la declaración responsable y el proyecto técnico para su posterior inspección por el cabildo.
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